Préstamos para reformas
Comprar una vivienda es mucho más que adquirir una casa. Cuando se compra una casa, no es sólo pagar por ella y ya está.
La inversión monetaria que se hace suele ser muy elevada, así que, el propietario, debe ofrecerle unos cuidados para conseguir que no acabe reducida a escombros y acondicionarla a sus gustos y necesidades para poder vivir en ella. Tener una vivienda en propiedad supone cuidarla; pintando, arreglando, cambiando o modificando todos sus elementos, si lo necesita, y convertirla en un hogar. Un dulce, cómodo, seguro y estable hogar.
Todo el mundo necesita un hogar. Todos necesitamos tener nuestro lugar, ese sitio donde nos sentimos seguros, protegidos, cómodos, tranquilos y en paz, por ello, cuando éste necesita que llevemos a cabo ciertas mejoras, pedimos un préstamo para poder realizar todas las reformas que necesitamos hacer. Por eso, en este artículo vamos a explicar en qué consisten los préstamos para reformas.
Condiciones para el préstamo de reformas
La mayoría de los propietarios de una vivienda piden, a lo largo de su vida, un préstamo o crédito para poder llevar a cabo una reforma en su hogar.
Aunque hacer obras en casa supone pasar algún tiempo entre ruidos, polvo y molestias varias, el resultado final es tan esperado que ponerse a ello, a fin de cuentas, es sólo un mero trámite.
Como hemos dicho, son tantas las personas que solicitan un préstamo para reformas, que la mayoría de entidades financieras ya disponen de estos productos específicos de financiación. A continuación, vamos a explicar las características principales que van asociadas a este tipo de préstamos:
- Cantidad: Según las necesidades de cada uno, las cantidades a pedir podrán variar desde los 3000 euros a los 90.000 euros, dependiendo también de la entidad a la que se le solicite el préstamo.
- Plazos: Según la cantidad solicitada, variarán los plazos de devolución, pero normalmente, este tipo de préstamos suelen concederse a devolver en un plazo máximo de 5 o 10 años, pagando cuotas mensuales con el importe que corresponda.
- Tipos de interés: los tipos de interés que se aplican a los préstamos para reformas suelen ser fijos. En el momento de la contratación, se firma con la entidad financiera el tipo de interés que se va a aplicar durante toda la vida de nuestro préstamo, las condiciones que irán asociadas a él, las comisiones de estudio, apertura, cancelación y amortización anticipada y los costes de la demora en los pagos. Los tipos de interés fijados irán sujetos a la oferta que nos haga cada entidad, pero actualmente están entre 6% y el 9%.
- Requisitos: el requisito necesario para solicitar un préstamo de reforma dependerá de la entidad financiera a la que estemos pidiendo el dinero. Algunas solicitan más o menos documentación, o incluso documentos específicos para la aprobación del préstamo. Aun así, hay algunos requisitos que son comunes para todas:
- En primer lugar, para que una entidad financiera conceda un préstamo destinado a hacer reformas, es necesario que el cliente sea mayor de edad.
- También es necesario que resida, de forma fija, en territorio español. El cliente debe aportar su DNI o tarjeta de residencia, quedando completamente excluidos aquellos clientes que sólo aporten su pasaporte, pues se entiende, entonces, que no son residente en España.
- Se deben presentar, también, las 3 últimas nóminas cobradas y la última declaración de la renta.
- Y, por último, el cliente interesado en adquirir un préstamo de reforma, deberá dar a la entidad financiera un justificante, o presupuesto, donde quede justificado el importe que se está solicitando.
- Como hemos dicho, algunas entidades pueden llegar a pedir, además, otros documentos complementarios como, por ejemplo, cualquier recibo domiciliado a nombre de la persona que solicita el préstamo, la fotocopia de la libreta de su entidad bancaria, o incluso, dependiendo de la cantidad pedida, un aval o segundo titular para el préstamo reforma.